Entre los trabajos de desarrollo de su nuevo i20 Rally2 (hasta ahora conocido como R5), Hyundai Motorsport incluyó tres días de pruebas de esa máquina en Francia con Craig Breen al volante, sumándose a lo hecho por Ott Tänak y el actual campeón WRC 3, Jari Huttunen, que ya lo había manejado en noviembre.
Diseñado por el departamento carrera-cliente que la marca coreana posee para sus autos de competición en Alzenau (Alemania), se supone que dos de los nombres que podrían correr con el antes que nadie serían los de Oliver Solberg y Ole-Christian Veiby.
Con la posibilidad de ensayarlo en pisos tan variados como asfalto seco, mojado, hielo y nieve, Breen no tardó en darse cuenta que es evidente la evolución con respecto al modelo anterior.
“La sensación de manejar este Hyundai fue realmente muy buena. Sus reacciones son predecibles y consistentes por el centro de rolido y la transmisión de pesos. Los ingenieros trabajaron con libertad en la geometría de suspensiones y eso también marca una diferencia sustancial”, dijo el irlandés.
“Es un coche que te brinda mucha confianza a medida que se lo exige. Y eso, de por sí, ayuda a bajar el tiempo de uno o varios tramos. Cuando uno larga un rally seco, con un poco de suerte existe la posibilidad de poner bien a punto cada auto, pero lo que me sorprendió de éste es que se va fortaleciendo incluso en condiciones de poca adherencia o de piso complicado, algo que ya no es tan simple de conseguir en otros modelos”.
Craig Breen hizo el Campeonato Europeo de Rally del año pasado sobre un Hyundai i20 R5 y en 2021 nuevamente se alternará en el tercer World Rally Car del torneo mundial con Daniel Sordo.