El domingo pasado, el campeonato FIA Fórmula 3 empezó en Montmeló su calendario con programaciones de tres carreras por fin de semana, muchas de las cuales compartidas con las Fórmulas 1 y 2.
En la primera de ellas, Alex Smolyar selló un gran triunfo, su primero en la especialidad, con una máquina del equipo ART Grand Prix, precediendo a Clement Novalak y el brasileño Caio Collet, que debutó.
Collet perdió la tercera posición por un instante al rozarse con Jonny Edgar, pero la recuperó y se convirtió en uno de los principales animadores del evento.
Smolyar le arrebató la punta que inicialmente era de Edgar, que había desgastado prematuramente sus neumáticos, y después tuvo que cuidarse de un incipiente acoso de Novalak.
Olli Caldwell se benefició no con uno, sino dos accidentes entre quienes ocupaban la primera fila en la segunda prueba, resultando también ganador primerizo en estos monoplazas internacionales.
Al principio, los golpes que se propinaron David Schumacher y Enzo Fittipaldi por un lado y Matteo Nannini y Dennis Hauger por el otro, hicieron que Caldwell y Victor Martins pasaran al frente.
Viendo que ser escolta era redituable. Martins elegió no atacar al británico que marcaba el rumbo. Frederik Vesti avanzó hasta el tercer lugar y Clement Novalak de undécimo a cuarto. El colombiano Juan Manuel Correa, en su regreso al automovilismo, saltó de 15º a décimo y sumó puntos en una tarde con más de 40 grados de temperatura ambiente.
En la tercera competencia, Dennis Hauger le dio otro éxito a la escudería italiana Prema Racing, en este caso controlando a sus adversarios de principio a fin. Lo escoltaron el neozelandés Jack Doohan y Matteo Nannini.
Más de cuatro segundos sobre Doohan tenía Hauger cuando recibió la bandera a cuadros, convirtiéndose en el tercer vencedor del evento catalán en obtener ese logro por primera vez.
Nannini fue por un rato su perseguidor más afanoso, pero fue perdiendo algo de ritmo después de un leve roce entre ambos.