Stéphane Ratel, impulsor de la clase GT3 a nivel internacional desde 2006, cree que la categoría estaría condenada si su formato es adoptado por campeonatos de diferentes regiones donde no se controlen los costos.
La nueva división GT Daytona Pro de IMSA en América del Norte ahora está basada en este tipo de vehículos, un caso similar al popular DTM alemán, que dejó de lado sus carísimos ejemplares para volcarse a los súper-deportivos que hacen varios fabricantes.
Ratel considera que estas son “señales preocupantes” porque tradicionalmente esos torneos han sido totalmente profesionales y sostenidos por equipos oficiales y no privados.
“Cuando categorías que son lideradas por los constructores mismos adoptan autos GT3, por su atractivo, es muy probable que tengan una gran fiesta durante dos o tres temporadas, pero en algún momento van a inflar tanto los presupuestos que se saldrá de control, como ha pasado siempre. Habrá una rápida evolución técnicas de las máquinas y eso las volverá más caras. El GT3 ha sido concebido tradicionalmente como un nicho carrera-cliente en el que se mezclan profesionales y aficionados. Eso está bien. Sin embargo, si la conviertes en una disciplina estrictamente profesional, el resultado es peligroso y su futuro está condenado”, opinó el directivo francés.
Ratel, cuya organización SRO gestiona las series GT World Challenge e Intercontinental GT Challenge, explicó que el éxito del GT3 se debió a la capacidad de los fabricantes involucrados para vender una gran cantidad de modelos en una categoría que se ha extendido por todo el mundo.
“El equilibrio del GT3 lo proporciona el factor de ventas, que actualmente es incluso más importante que el valor de mercadeo obtenido por ganar competencias. Podría haber problemas si más categorías lo llevan a un perfil más alto; el DTM y otros podrían representar un riesgo. En las 24 Horas de Le Mans, a Automobile Club de l’Ouest (sus organizadores) por lo general le gusta tener su propia clase y me parece que dan por hecho que GT3 es sinónimo de SRO. Ahora, IMSA ha elegido GT3 para su división GTD Pro y quizás ACO no los admita en su evento. Con el éxito de LMH y LMDh, ¿realmente necesitarán autos GT3? No estoy seguro, porque la parrilla en la primera clase será asombrosa”, concluyó.
El futuro de las divisiones GT serán anunciados por ACO y la FIA a fines de agosto próximo.
Video: Los GT han sido un gran atractivo del automovilismo por más de 60 años.