Desde hace varios meses, la Fórmula 1 estudia distintas opciones para mejorar su espectáculo los fines de semana de carrera. Entre las ideas que circularon, las más fuertes fueron invertir las posiciones de clasificación para conformar la grilla de largada o hacer carreras cortas tipo “sprint” los sábados.
Esta última propuesta fue la que contó con mejor aceptación, pero no sin un inconveniente: el hecho de acumular más kilómetros de competencia, agrega un costo extra para todos los equipos, ya que estas pruebas tendrían una duración de 100 kilómetros, un tercio del recorrido total de un Gran Premio.
Las escuadras plantearon de inmediato a la organización el tema, que redundaría aproximadamente en otro millón de dólares en sus presupuestos, e incluso las más pequeñas argumentaron que un monto así también podría desviarse a desarrollos y, de esta manera, ampliar la brecha entre los autos más rendidores y los menos.
En las últimas horas, habría prosperado una iniciativa mediante la cual se le aportarían a todos los equipos U$S500.000 por cada carrera sprint y un fondo extra en caso que algún coche sufra daños importantes durante estas fechas sabatinas.
Específicamente, las mismas tendrían lugar en Silverstone (Gran Bretaña), Monza (Italia) e Interlagos (Brasil) y no solamente conformarán la grilla del domingo, sino que también sumarán puntos por el campeonato.
La votación definitiva se realizará en unos días cuando todos los participantes vuelvan a reunirse en ocasión de la cita que se llevará a cabo en Imola.