Supercars, la categoría australiana más popular, tiene todo listo para efectuar la quinta fecha de su calendario en Winton (estado de Victoria), pero un brote de covid-19 en la región de Melbourne ha puesto en alerta a las autoridades.
Winton se ubica a 200 kilómetros al noreste de esa ciudad, donde en las últimas horas se ha registrado un aumento de los casos, lo que haría que el gobierno local obligue a un cierre de las actividades.
Hasta el momento, ninguna de las competencias efectuadas por la serie de autos V8 ha tenido inconvenientes, ni siquiera cuando hubo ingreso irrestricto de público sin la obligación de utilizar mascarillas por parte de los participantes o de quienes estaban en las instalaciones de cada circuito.
“Las próximas 24 horas serán críticas”, dijo James Merlino, primer ministro de Victoria. “Mo vamos a presagiar cuáles pueden ser o no esos cambios. Dependerá de lo que suceda el viernes y de los consejos del equipo de salud pública”.
Los administradores de la pista publicaron el martes en sus redes sociales: “Nuestro consejo es que la competencia Winton SuperSprint puede continuar con la normalidad de un evento público aprobado de Nivel 1. Las restricciones anunciadas para Melbourne ayer se aplican a las reuniones públicas, que es algo diferente. Una vez dentro del recinto Winton Raceway, nuestro plan sanitario aprobado está en vigor con códigos QR y datos de rastreo disponibles en caso de que sea necesario”.
Sin embargo, el panorama podría cambiar de acuerdo a la evolución de los contagios que se detecten en la región, a lo cual se sumarían posibles restricciones para quienes se estén trasladando Queensland o Nueva Gales del Sur, donde también se han advertido rebrotes.